Se que nos hemos atrasado un poco pero en fin ¡aquí os dejo la historia espero que os guste! nos lo hemos pasado muy bien haciéndola:
En una noche fría y lluviosa de invierno unos ojos se encontraban mirando por la ventana , esos
ojos muertos ven a un grupo de
adolescentes disfrazados para la noche de halloween,estos adolescentes se
encuentran con una casa algo extraña y
dispuestos a pasar una noche de lo más terrorífica, se acercan a la casa
que todo el mundo dice que esta embrujada.
Mike, se dispone a dirigir el grupo y toma la iniciativa. Sube los
cuatro escalones de madera vieja que crujen con sus pasos y llama a los demás para que lo sigan.
-Mike, ¿qué hacemos? -pregunta Susan asustada.
-No sé...
-Mike, tu eres el líder, ¡debes decidir! -dice Boby desde el
final del grupo.
-Vale, entremos en la casa embrujada.
-¿En la casa embrujada? ¿Estas seguro Mike?- dice Michael algo
confuso y con un hilo de ironía en la voz..
De repente cae un rayo, y hace que un árbol les corte el paso, por lo que los chicos
deciden que deben entrar en la casa.
Susan, impaciente avanza y llama en el picaporte, por el
impulso, la puerta se abre con un crujido. Dándoles paso hacia la casa.
Steffanie se acerca donde está Susan y entran juntas cogidas del brazo,
seguidas de Mike y Michael. Pero Boby y Gordi no están seguros de entrar,
entonces Mike dice:
-Será mejor que vosotros dos os quedéis fuera por si acaso,
vigilando, mientras tanto nosotros
inspeccionaremos la casa. Para ver lo que hay dentro.
-Me parece bien -dice Boby mirando a Gordi- ¿Pero esta no es la
casa donde dicen que una noche murieron seis adolescentes?
-Creo que sí, así que me quedo con Boby fuera -coincide Gordi.
-Vale -dice Mike- Púes esperad a que os demos alguna señal.
Y dicho esto Mike, Susan, Steffanie y Michael deján a Boby y
Gordi solos en el umbral de la puerta.
Una vez dentro de la
casa, Susan, cogida del brazo de Steffanie se tropieza con una vieja cómoda,
donde de ella cae un enorme candelabro provocando un sonido estridente que
resuena por toda la casa. Entonces Mike
recoge el candelabro, se dirige a Michael y le dice:
-¿Tienes un mechero?
-Claro que lo tengo, siempre llevo uno.
Michael mira en su bolsillo trasero de los pantalones y
encuentra un mechero, que le entrega a Mike. Al encenderlo, el oscuro recibidor
se ilumina vagamente por la débil llama que dejaba ver unas oscuras escaleras
que se dirigen al sótano y otra al piso superior. En ellas, cuelgan numerosos
cuadros de un chico de pelo rubio con
unos ojos grises,que parecía que los miraba fijamente. Su rostro era hermoso y
serio, mirando al frente. El marco del retrato era de color dorado, y en él se
podía leer un nombre: “Héctor”
-¿Quién sería? -pregunta Susan con un hilo de voz.
-Seguramente viviese aquí antes- dice Steffanie, sin soltar a
su amiga.
-Vale, dejémonos de tonterías, Susan, Steffanie vosotras dos
mirad el piso superior mientras yo y Michael inspeccionamos la planta baja.
Dentro de media hora nos encontramos otra vez aquí y miraremos el sótano.
Susan y Steffanie, con paso vacilante, suben las escaleras
observando a los cuadros pegados a la pared. Hasta que dan con una puerta y
deciden entrar a mirar. Al abrir la puerta iluminada por la débil llama de la
vela. Las chicas pueden observar una habitación, con unos muebles muy antiguos,
cubiertos completamente por sábanas. La cama estaba totalmente rota con las
sábanas blancas deshechas y desgarradas. Las dos chicas se acercan despacio a
la cama intentando descubrir que veían en ella, ambas sueltan un grito al
descubrir que las sábanas estaban manchadas de sangre. Y al descubrir las
sábanas manchadas miran alrededor fijándose en que toda, la habitación está
manchada de esa sangre, excepto el armario. Que parece no encajar en la escena
en la que se encuentran. Entonces la puerta del dormitorio se cierra de golpe.
Sobresaltándolas aún más. De repente se empezaron a oír unos pasos por el
pasillo. Sin mejor sitio donde esconderse, las dos chicas deciden esconderse en
el armario con la esperanza de no ser descubiertos por un posible agresor.
Desesperadas abren las puertas del inmenso armario y entonces se encuentran con
un chico, muy parecido al que habían visto en los cuadros.Pero ese chico atractivo que observaron en el
cuadro, el chico tenía una piel pálida
casi translúcida de un color verde que permite ver sus venas azules en su
cuello desgarrado. Sus ropas estaban sucias, allí donde la sangre parecía haber
salido de antiguas heridas, muy viejas
desintegrándose por los años de uso. Cubrían lo que hace años debía haber sido
el chico de los cuadros que abundaban en las paredes de toda la casa.
Entonces Susan, aterrada por lo que tenían ante sus ojos, dice
con voz muy débil:
-¿Ese no es el chico de los retratos?
-Creo que sí, se parece bastante- dice Steffanie con un intento
de parecer valiente pero la voz se le quebró.
-Será mejor que nos vayamos de aquí cuanto antes- dice Susan.
-¿Pero como? ¡La puerta se ha cerrado sola!
Las chicas se alejan del armario con pasos vacilantes, pensando
que el chico estaba muerto, deciden buscar por la habitación alguna ventana
para poder escapar. Pero Steffanie tropieza con una de las sábanas de uno
muebles y choca contra el armario, provocando un ruido muy fuerte.
Entonces de dentro del armario se escucha un gruñido,
ambas,aterrorizadas, retroceden. Y ven como el chico comienza a abrir los ojos,
sus ojos eran completamente negros, y la expresión de su cara se torno de una
forma muy violenta, empezó a removerse en el armario, las dos chicas, se
cogierón de la mano,con fuerza, y se
dirigieron corriendo hacia la puerta, dándoles igual si estaba cerrada o no,
intentaron derribarla, pero de repente notaron un peso sobre ellas, era el
chico, que se había abalanzado sobre ambas.
Las chicas intentaron apartarlo, pero sus intentos eran
inútiles el chico tenía demasiada fuerza. De un mordisco le hizo un profundo
corte en el cuello a Susan, que comenzó a gritar con fuerza, Steffanie
aprovechó para salvarse de el cuerpo putrefacto del Zombie, miró a su alrededor
y encontró un palo de acero, lo cogió e intentó golpear al zombie, pero con los
nervios el palo se le fue de las manos y falló, el zombie aprovechó y le hizo
otro arañazo en el cuello, provocándole hay y en la cabeza un gran ardor, por
lo que no pudo continuar defendiéndose....
-¿Has escuchado eso? -pregunta Michael desde la cocina- Creo
que venía del piso superior.
-Puede que las chicas vieran una rata o algo...
Responde Mike sin darle mucha importancia al asunto.
-Oh, no...
-¿Qué pasa Michael?
-El mechero... -empieza a decir Michael antes de que se apague
la flama dejándolos a oscuras.
-Shhh... , creo que he oído algo, pero esta vez no viene del
piso de arriba, sino del pasillo... ¿son pasos?
-A lo mejor son las chicas, que vienen hacia aquí.
-¿Y como saben que estamos aquí y no en el comedor por ejemplo?
-Y yo que sé. Nos habrán oído. Vamos a comprobarlo -propone
Michael.
Ambos chicos se dirigen hacia el pasillo en busca de las
chicas, pero no las encuentran, en su lugar ven a un chico al final del
pasillo, el chico se acerca lentamente hacia ellos, Michael y Mike se esperan
en la puerta de la cocina pensándose que sería Boby que después de tanto
esperar fuera ha entrado a buscarlos. Y poco a poco, la silueta del chico que
se acercaba se parecía más al chico de los retratos anteriores. El ‘chico’ que
se acercaba tambaleante, por lo que Michael y Mike estaban confusos, vieron que
el chico tenía un aspecto horrible, la ropa la llevaba rota y cubierta de
sangre, Mike se echó hacia atrás y con el impulso hizo entrar también a Michael
en la cocina, y cerró la puerta con la esperanza de impedirle el paso a ese
chico que no era para nada Boby.
Cuando el chico llegó a la puerta empezó a empujarla y darle
golpes hasta el punto que Mike y Michael se pensaron que la derrivaría, pero de
golpe cesaron. Michael y Mike, aliviados y con unos cuchillos de cocina se
acercan despacio a la puerta para entre abrirla y para poder observar si había
alguien fuera. Pero les abren la puerta con un empujón irrumpiendo en la cocina
Susana y Steffanie.
-¿Donde estábais? -pregunta Michael a las chicas.
-¿No habéis visto a nadie afuera? -pregunta Mike ya que las
chicas no responden.
Las dos tienen la cabeza gacha y sueltan algunos gruñidos, pero
nada más. Están quietas en un mismo sitio balanceándose levemente moviendo los
brazos hacia los lados.
-¡Ei, chicas! Responded, ¿no? -dice Michael algo mosqueado.
Entonces Mike se acerca a Susan y le pone una mano en el
hombro. Acto seguido Susan se avalanza encima suyo derrivándolo al suelo. La
puerta se abre lentamente y de ella entra el chico que había en el pasillo,
pero con un estado de putrefacción y un olor insoportable.
Michael, decide plantar cara al chico y ayudar a su amigo que
forcejeaba con Susan que cae al suelo, Mike se coloca delante y con el cuchillo
que llevaba en la mano se acerca al chico y le hace un corte en el abdomen.
Mike aprovecha y retrocede junto a su amigo, pero el chico se
dirige hacia ellos enfadado y de un manotazo los empuja contra la pared. Al
chocar contra la pared caen al suelo y pierden los cuchillos, intentan
alcanzarlos pero entonces aparecen Susan y Steffanie y los cogen antes que
ellos. Estaban rodeados por el chico y sus dos amigas, no sabían qué hacer,
Steffanie se les acerca y sin ninguna expresión en la cara muerde a Michael en
el hombro provocándole un dolor agudo. Steffanie se retira y un ardor que le va
del hombro y le recorre todo el brazo le hacen retorcer de dolor mientras Mike
es atacado por Héctor.
-¿Mike, Michael, Susan, Steffanie? ¿Estáis ahí? Gordi y yo os
estamos esperando fuera -Gordi abre la puerta de la entrada- ¿estáis ahí
dentro? Vamos, no es momento para bromas...
Entonces, Gordi mira a Boby y le dice:
-Espera aquí ahora vuelvo.
-De acuerdo, pero no tardes demasiado, no me gusta este sitio,
todo el mundo habla mal de él- dice Boby.
Gordi entra dentro de la casa, con la esperanza de encontrar a
sus amigos, como no oye nada en la planta baja, decide subir al pasillo de
arriba, para comprobar si hay alguien.
Una vez arriba oye un ruido que proviene de la sala de estar,
entra en ella con paso inseguro y dice:
-¿Mike, Susan, Michael, Steffanie? Estáis ahí, Boby está
esperándonos fuera...
Como no le responden decide entrar dentro de la sala, al entrar
ve a unas sombras que se movían hacia él.
Pero estas sombras se tambaleaban hacia los lados, Gordi nervioso
retrocede pero nota algo detrás de él, se da la vuelta y descubre a Mikel que
le miraba fijamente a los ojos.
-Mike, ¿Qué te pasa, tio? Estas muy raro, y no estoy para
bromas- dice Gordi.
Luego Gordi vuelve a notar algo a su espalda se gira y
sorprendido, contempla que está rodeado de todos sus amigos, y de alguien más
que, cree haber visto antes.
-¿Se puede saber qué os pasa? ¡Estáis horribles!- dijo
nervioso.
Pero lo único que consigue, como respuesta es un gruñido de
Michael.
Gordi no sabía a donde ir, mientras estaba intentando hablar
con Mikel, el resto lo rodeó, consciente
de que pasaba algo raro intentó derribar a Michael para escapar, pero este era
más fuerte y lo empujo al suelo, intentó levantarse pero le era imposible,
todos estaban sobre él, entonces Héctor se hizo paso entre los chicos, se
agacho y mordió a Gordi muy fuerte, este no pudo evitar gritar, luego el resto
se abalanzaron sobre él y empezaron a arañarlo por lo que Gordi gritó aún más
fuerte.
Mientras Boby que aún seguía abajo empezó a escuchar los
gritos, asustado, entró corriendo, guiado por los gritos hasta el lugar del que
procedían, se asomó a la puerta justo a tiempo para ver como su amigo cambiaba
completamente de aspecto, y observó que estaba rodeado por Mikel, Michel, Susan
y Steffanie, y todos tenían un aspecto horrible.
aterrorizado se fué de la puerta y corrió hacia afuera..., Boby
corrió bajo la lluvia sin girarse, solo lo hizo al encontrarse con el enorme
árbol que le impedía el accesos a la puerta de la alta valla. A la lejanía pudo
observar las tenues figuras de sus perseguidores. Andaban despacio y
tambaleantes debajo de la lluvia, dándoles un aspecto siniestro que hizo a Boby
coger carrerilla para saltar el inmenso árbol. A causa del barro y de que Boby
nunca fue uno de los mejores en educación física, no aterrizó bien al otro lado
del árbol y resbaló ropiéndose el tobillo. Las sombras estaban cada vez más
cerca y Boby, asustado y sin poder correr se acerca a la puerta de la gran
valla de la casa como puede, intentando no apoyar su peso en el tobillo roto.
Después de un forcejeo con la cerradura consigue abrir la puerta y cerrarla
detrás de sí con la esperanza de que con el árbol y la puerta impidan a los
zombies llegar hasta él. Sin saber muy bien que hacer, Boby corre hacia la
carretera donde pocos coches transitaban a causa de la lluvia.
Cuando creía que no iba ha pasar ningún coche apareció una
furgoneta de color gris, Boby hizo señales para que el coche parase, al llegar
el coche hacía él paró un hombre gordito y calvo, bajo la ventanilla y con voz
ronca dijo:
-¿Necesitas que te lleve a algún sitio?
-Si, por favor, ¿puede llevarme al pueblo de al lado?
-Vale, de todas formas iba a pasar por hay.
Boby montó en el coche una vez que el hombre le abrió la
puerta, al entrar se sentó, y contempló por la ventanilla, como la sombra de
los que antes eran sus amigos se iban alejando cada vez más.
OMG,OMG,OMG! Que ilusión ver nuestra historia publicada! xDDD
ResponderEliminarNos ha quedado algo larga! jajja
Si verdad?? da ilusión verla publicada!!
EliminarLa verdad es que si ha quedado larguita jaja
¡¡Viva nosotras!! XD
A mi no me ha parecido larga. Eso sí, es ideal para leerlo en noche de lluvia, sobre todo de noche. Espero que sigáis con este tipo de iniciativas.
ResponderEliminarUn saludo.
Eso es que te gusto :D ¡Me alegro!
EliminarTienes razón leerla de noche con lluvia sería ideal.
Púes puede que sigamos cada Domingo, con algo parecido!! :D
Un saludo!! =)
Me encantado, la he pasado super bien leyendola, espero que sigan asi (para nada me ha parecido larga)n.n
ResponderEliminarGracias por seguirme, yo ya te sigo, entonces nos veremos más seguido, espero seguir viéndote en el mio
kuidate
Que bien que te gustase!!
ResponderEliminarGracias a ti también por seguirme! ya me veras más por tu blog^^
besos